Rosa María Echeverría: “Los sueños imposibles sólo pueden hacerse posibles en la creación”
A lo largo de su intensa actividad como periodista, Rosa María Echeverría, ha realizado viajes a diferentes países del mundo para llevar a cabo grandes entrevistas y reportajes que constituían una fusión entre literatura y periodismo. Ha recibido importantes premios en su carrera profesional como periodista. Es autora de varios ensayos sobre arte y ha participado en distintos seminarios con jóvenes periodistas latinoamericanos. En los últimos años ha trabajado en la sección de cultura del diario ABC. Ahora, la periodista presenta “El Palacio de los Vientos”, una obra calificada por Luis María Anson, presidente de EL IMPARCIAL y académico, como “una interesante novela llena de sorpresas y hallazgos literarios. Brillantemente escrita, además”.
http://www.elimparcial.es:6680/node/39862
EL IMPARCIAL
19-05-2009
Durante su vida profesional ha seguido de cerca la labor literaria y artística que se lleva a cabo en nuestro país. ¿Cómo ha afectado, si es que ha sido así, a su obra el haberse dedicado al periodismo cultural?
A lo largo de mi actividad creo que he desarrollado todos los géneros periodísticos y no sólo el periodismo cultural. Lo que sucede es que siempre he sentido una especial fascinación por ese universo mágico en el que se despliegan todas las facetas del arte. He conectado bien con los grandes creadores y sus distintos lenguajes estéticos y siempre me he sentido atraída de un modo instintivo por estos personajes, aunque es verdad que la vida te lleva después por todo tipo de derroteros. Este es el encanto de la existencia ya que se trata de una especie de caja de sorpresas, unas francamente agradables y otras que hay que superar con grandes dosis de sentido del humor. Te conviertes en un artesano de la realidad pura y dura. Los sueños imposibles sólo pueden hacerse posibles en la creación. El contacto con la vida cultural me ha enseñado a descubrir que el universo se encuentra sometido a la profundidad de los constantes asombros lo cual no deja de ser bastante maravilloso.
He tenido la suerte de poder leer libros de gran calidad y he disfrutado enormemente con ellos. Les estoy sumamente agradecida, incluso a esos libros horribles que uno termina en plan masoquista sintiendo por ellos una especie de piedad. Todos aportan algo positivo. Siempre se ha dicho que un libro es un tesoro, lo cual no deja de ser un consuelo en estos tiempos de crisis, además de constituir una magnífica inversión. Me siento deudora de Valle Inclán y de su pasmosa música literaria, del desafío de las vanguardias, de James Joyce que me descubrió el vértigo de la contemplación interior, de la hondura de los escritores rusos, de la belleza estética de García Márquez, del contenido lírico del realismo mágico o de escritores como Tabucchi. En fin, un abanico muy amplio.
¿Bajo qué parámetros encuadraría El Palacio de los vientos? ¿Cómo definiría esta obra? Juan Manuel de Prada ha escrito sobre este libro que “logra captar la aventura prodigiosa de la existencia” ¿Tiene esto algo que ver el hecho de que la mayoría de los personajes sean mujeres?
No, no, hay tantos protagonistas hombres como mujeres. He respetado escrupulosamente la paridad o tendré que vérmelas con la ministra del ramo. Lo que sucede es que las mujeres tienen mucha fuerza, saben coger al toro de la vida por los cuernos y son capaces de grandes heroicidades mientras tienden la mano a la esperanza. Quizá por eso tienen un papel determinante. Definiría esta novela como un gran canto al amor, de hecho algunos de los personajes sienten una necesidad a veces desesperada de amar aunque les resulta difícil conseguirlo cuando viven encerrados en sus propios problemas. Creo que se trata de una gran reflexión sobre este sentimiento que constituye el único camino para alcanzar la felicidad.
Esta obra posee una calidad literaria alabada por grandes escritores; sin embargo hoy se tiene la percepción de que para alzarse en las listas de ventas esto puede ser un impedimento ¿Qué opina de esta circunstancia? ¿Hemos perdido la capacidad para apreciar y valorar la calidad de un texto?
No, creo que cualquier ser humano busca el equilibrio interno que produce la belleza. Cada cual a su nivel por supuesto. Es verdad que se requiere una formación básica y por eso es tan importante fomentar la lectura. También es cierto que existen literaturas experimentales, que tienen un importante papel porque buscan nuevos caminos de expresión, pero que utilizan un lenguaje críptico, un lenguaje por tanto de difícil acceso para los no iniciados. No es este el caso de “El Palacio de los Vientos”. Es una novela planteada con un gran ritmo interior, donde las imágenes asumen un papel preponderante, una especie de visualización de los sentimientos en un escenario casi cinematográfico y donde de algún modo la naturaleza constituye un testigo impresionante en esta hermosa aventura de vivir.