Tiene el pelo encaracolado y se le hacen caracoles los pies cuando anda. A veces tropieza con la nada, otras, con el mundo entero si se descoloca. En casa, su familia se ocupa de quitar obstáculos a su paso. Sillas, alfombras, sombras, duendes y hadas. En la calle ya hay bordillos que no son edificios […]
Hubiera preferido que el diagnóstico fuera igual que el de Marianne Faithfull en La profesión de Irina Palm (no lo pongo por si me lee mi madre). Pero no. Codo de tenista. Como mis raquetas crían malvas hasta el verano, lo achaco a un mal golpe en la clase de kick boxing. Cuelgo los guantes […]