>

Blogs

lolaleonardo

mis tripas, corazón

Las botas del soldado

Con solamente dos frases se puede definir la película ‘1998. Los últimos de Filipinas’: “Viva España” y “A la mierda España”. Ambas las pronuncia el mismo personaje, el sargento Jimeno al principio y al final de esta experiencia neoépica. A través de este reduccionismo no quiero simplificar el bestial trabajo de todo el equipo, sino admirar una evolución de pensamiento que arrastra y envuelve al espectador, haciéndonos sentir más vergüenza que la que sentimos cuando de pasada estudiábamos la historia del fin del imperio; como siempre, el esplendor copaba los temas gordos y las derrotas se ventilaban en capítulos que cabían en etiquetas de quesitos.

La sensación de olvido y abandono que sintieron aquellos soldados por parte del Estado es comparable a la que vivimos en la actualidad. La ineptitud de los gobernantes es hereditaria y contagiosa; la desolación del pueblo se ha enquistado en su ADN. No hay manera.

Así las cosas, si alguna vez nos da por no sentirnos españoles, o por sentirnos no españoles, no merecemos ser fusilados al alba en twitter, o sí, pero sin sangre, porque siempre sale al viento, al paso y al repaso algún patriota sin más patria que la intolerancia.

He escuchado un par de veces el discurso de Fernando Trueba en 2015 tras ser galardonado con el Premio Nacional de Cinematografía y, haciendo recuento, me habré sentido Trueba unos quinientos segundos al día en los últimos lustros. Tú también. Y más si a tu lado está Íñigo Méndez de Vigo y Montojo (es una sola persona, sí, aunque parezca trino), barón de Claret, actual ministro de Educación, Cultura, Deportes y Repollos, gran aficionado a Cine de Barrio. Y entre esta querencia del también portavoz del Gobierno y que muy poco debe saber de enseñanza pública (los aristócratas viven y van a misa en mundos paralelos a éste), no es de extrañar que a eso de las seis de la tarde nos entren ganas de expatriarnos a París y no volver hasta después de la media noche, o de no volver nunca.

Dos años antes que Trueba, el director de ‘Lo imposible’ recogía su premio y sonrojaba con sus palabras al predecesor del barón. “Mis padres entendieron mejor que nadie que la educación no era un gasto, sino una inversión”, señalaba Juan Antonio Bayona. Wert puso cara de querer ser tragado por la tierra y poco después él se teletransportó a orillas del Sena para vivir de lujo a costa de nuestros costados y de las botas pequeñas que le dieron al soldado artista extremeño para ir a luchar a Filipinas.

Mientras el mundo del cine se rebota, los estudiantes se indignan y los casi cuatro millones de parados se levantan con la angustia de cómo poder llegar a fin de día, ellos, los de arriba, sueñan cómo embarcarnos rumbo a Manila. Han pedido a los reyes magos una gran remesa de fusiles de berjusa y chanclas del todoacién para todos estos siervos de la gleba sin tierra en que nos han convertido. Y luego que nos duele España…


diciembre 2016
MTWTFSS
   1234
567891011
12131415161718
19202122232425
262728293031