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Silvia Alonso Guijarro

Diario de una expedicionaria

Madurez y superación personal en la Ruta BBVA 2015

Los expedicionarios de Castilla y León en Aracataca (Foto Ángel Colina)

 

Finaliza la XXX edición de la Ruta BBVA tras recorrer España y Colombia durante más de un mes.

La celebración del 30 cumpleaños de la Ruta BBVA –anterior Quetzal – se ha hecho desear este año un poco más de lo habitual. A diferencia de otras ediciones, la aventura ha tenido lugar desde finales de julio hasta finales de agosto. Además, otra de las novedades más importantes de esta edición ha sido el cambio de edad de los participantes; todos ellos tienen que haber cumplido 18 años y están en la universidad o la empezarán este septiembre. El cambio de edad se ha percibido en una “mayor madurez y conocimiento por parte de los expedicionarios” asegura Andrés Ciudad, subdirector de la Ruta BBVA, 

El pasado jueves, 27 de agosto, desde primera hora de la mañana, familiares y amigos inundaron Barajas para dar una bienvenida, más que merecida, a los jóvenes que han vivido 34 días de aventuras, emociones y aprendizaje. Bajo el nombre “Aventura en el País de las Esmeraldas” los 174 expedicionarios de 21 países diferentes han recorrido España y, posteriormente, Colombia.

La Ruta BBVA es un viaje que combina la educación en valores, el intercambio cultural y la aventura, y fue creado por Miguel de la Quadra-Salcedo a sugerencia de S.M. el Rey Don Juan Carlos. Los participantes han sido elegidos por un riguroso proceso de selección a través de un trabajo literario o musical y otro de emprendimiento social. Cerca de 10.000 jóvenes de todo el mundo han tenido la oportunidad de vivir esta experiencia que marca un antes y un después en su vida. Entre ellos se encuentran Ángel Pedro y Jorge, de Ávila; Patricia e Irene, de Burgos; Blanca, de Palencia; Sara, Adrián y David, de Salamanca; María, Berta y Agustín (monitor), de Valladolid, y Virginia (monitora) de Zamora.

Ser expedicionario de la Ruta BBVA no es fácil pero tampoco imposible. Para Ángel Pedro, al igual que para otros muchos de sus compañeros, ésta ha sido la tercera vez que se ha presentado. “Cuando ya había agotado las dos oportunidades que tienes para presentarte, cambiaron la edad de las bases de participación, y no dudé en volverlo  intentar” asegura.

A la tercera fue la vencida. Y así, entre incertidumbre y nerviosismo, llegó el sábado 25 de julio. Día en el que, por fin, esas personas que solo conocía por las fotos del anuario y las redes sociales se convirtieron en compañeros de grupo, de tienda, del aula de música… y, poco a poco, en mucho más.

 

Descubriendo la historia y cultura de Castilla y León

Como viene siendo habitual, la primera parada de la etapa española fue Madrid donde los jóvenes visitaron el Museo del Prado y el Palacio Real.   En la capital también participaron en una jornada de sensibilización y acercamiento al mundo de la discapacidad. Los más de 170 estudiantes realizaron diferentes actividades en la sede del Centro Superior de Deportes de Madrid acompañados por deportistas paralímpicos de élite.

La Ruta BBVA, con la colaboración de Fundación ONCE y CERMI (Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad),  ha apostado un año más, por la integración de las personas con discapacidad en este programa con el objetivo de impulsar la inclusión social. Adrián de Salamanca y David de Barcelona, claros ejemplos de superación personal, han sido unos estupendos y valientes embajadores de la discapacidad de esta edición  2015.

En Toledo, la ciudad de las tres culturas, se acercaron a la figura de Miguel de Cervantes para conmemorar el cuarto centenario de la segunda parte del Quijote. Antes de poner rumbo hacia Castilla y león, el martes 28 de julio Su Majestad, el Rey Felipe VI, hizo un hueco en su apretada agenda para recibir a parte de la expedición de la Ruta BBVA 2015. El Monarca aseguró a los jóvenes que siente envidia sana de todos ellos porque iban a vivir «una experiencia inolvidable que guardarán en su memoria para siempre». 

Una vez en la comunidad, Ávila fue la primera parada donde visitaron la exposición “Las Edades del Hombre: Teresa de Jesús, maestra de oración” para celebrar el V Centenario de Santa Teresa de Jesús. Esta jornada fue muy especial para los dos  abulenses, Ángel Pedro y Jorge, quienes se convirtieron en guías por un día para enseñar y explicar la ciudad a sus compañeros.

Los ruteros paseando por la muralla de Ávila (Foto Ángel Colina)

Un año más, la Ruta BBVA recaló en la acogedora localidad de Santervás de Campos donde han creado el Museo de la Quadra-Salcedo, alma mater de este programa, con objetos de diferentes ediciones de la ruta. Al igual que Santervás, muchas son las ciudades, pueblos, comunidades… que reciben a estos jóvenes con los brazos abiertos y como afirma Irene de Aranda de Duero: “sorprende muchísimo la hospitalidad de la gente de cada lugar por el que pasamos. Desde hacernos unas sopas de ajo para más de 200 personas hasta contratarnos una discomovida”.

Desde allí, toda la expedición se desplazó hasta León donde les dio la bienvenida su alcalde, Antonio Silván. Tras la visita histórica y cultural por la ciudad, se trasladaron al Coto Escolar Municipal de León para realizar los talleres de emprendimiento social. Al día siguiente los jóvenes visitaron Las Médulas, un bello paisaje resultado de las explotaciones auríferas romanas. La estampa rojiza de las montañas que desde allí pudieron contemplar dejó a todos boquiabiertos y fue perfecta para hacerse los millones de selfies.

Tras realizar dos etapas del Camino de Santiago; la primera, desde O´Cebreiro  hasta Triacastela, y la segunda, desde Sarria hasta Portomarín, la Ruta BBVA llegó a Santiago. Los 174 irrumpieron en la plaza del Obradoiro corriendo, cantando y gritando de la emoción por haber llegado ante la atónita mirada de los compostelanos.

El punto final de su periplo por España lo puso el cabo de Finisterre, lo que hace años se creía que era el fin de la tierra. Antes de embarcarse hacia la etapa americana, Miguel de la Quadra, que por problemas de salud ya no les acompaña, se acercó a la plaza de Colón de Madrid para desearles buen viaje.

 

En la cuna de García Márquez

En la calurosa ciudad de Cartagena de Indias, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984, aterrizaron los expedicionarios tras cruzar el Atlántico. Los jóvenes tuvieron la oportunidad de recorrer las calles de esta bella localidad colonial, así como el Castillo de San Felipe de Barajas.

Recorriendo el Parque Nacional Tayrona (Foto Ángel Colina)

Antes de desplazarse hasta el Parque Nacional de Tayrona, uno de los lugares más deseados de esta edición, los expedicionarios pasaron una emocionante mañana en la Fundación Juan Felipe Gómez Escobar, que presta atención a las jóvenes y adolescentes embarazadas y a sus hijos que viven situaciones de exclusión familiar, económica y social.

A continuación, llegó uno de los días más deseados de esta aventura, la primera marcha en Colombia: atravesar la selva del Parque Nacional de Tayrona para llegar a Pueblito. El calor y la humedad, que fueron los protagonistas de esta jornada de 29 kilómetros, complicaron aún más el recorrido. En situaciones como ésta, el compañerismo y la superación personal son la tónica dominante entre los expedicionarios. En esto, también consiste la Ruta BBVA. El recorrido tuvo una gran recompensa, adentrarse en el pueblo indígena de los kogui.

Santa Marta, ciudad natal de Juan Carlos Pibe Valderrama, futbolista colombiano y jugador del Real Valladolid en 1991, quien hoy en día sigue siendo un icono de la ciudad, fue la siguiente parada. Los ruteros se alojaron en la Quinta de San Pedro Alejandrino, hacienda fundada en 1608 y en la que el Liberador Simón Bolívar pasó sus últimos días.

Y por fin llegó el día en el que el realismo mágico del Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, inundó a los ruteros en Aracataca, su ciudad natal. Para Blanca de Palencia, que es una apasionada de la literatura del escritor colombiano, poder conocer a su hermano y pasear por las calles donde se inspiraba para sus libros, era uno de los mayores atractivos de Colombia.

Barichara, conocido como “el pueblo más bonito de Colombia”, y San Gil, la capital colombiana de los deportes de aventura, iban dibujando los últimos días de este viaje iniciático. Pero antes de terminar, los mirmebros de las Ruta BBVA 2015 superaron un gran reto: la caminata por el Cañón del Chicamocha. Una marcha de más 8 horas, con 40 grados y sin sombras, que no todos pudieron finalizar.

Como no podía ser de otra manera, Bogota y la recepción del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, pusieron el punto y final a esta XXX edición de la Ruta BBVA.

Este viaje iniciático terminó el pasado jueves 27 de agosto, pero la ruta de verdad comienza ahora. Recordando anécdotas, viendo vídeos, fotos, reflexionando todo lo vivido… Definir qué es la Ruta BBVA es complicado, para cada persona que la haya vivido significara una cosa diferente: “un cambio de mentalidad”, “un universo paralelo” o, simplemente, “un puzle donde todas las piezas encajan”. Lo que está claro es que quien la haya vivido no se olvidará de ella. 

 

David y Adrián, embajadores de la discapacidad, con Miguel de la Quadra-Salcedo (Foto Ángel Colina)

El salmantino Adrián Rincón, rutero invidente de la Ruta BBVA

Adrián es un joven de 19 años que como sus otros 173 compañeros sintió la llamada y el deseo de aventura. Un vallenato – género musical de Colombia- compuesto para bajo eléctrico, piano, acordeón, percusión y voz le abrió las puertas a este programa.  Este septiembre Adrián  comenzará 2º de bachillerato musical y 6º de piano en el Conservatorio de Salamanca.

Su discapacidad visual del casi el 100% no le ha impedido ser un rutero más. Adrián ha marcado el ritmo de toda la expedición en las caminatas del Camino de Santiago, ha logrado cruzar la selva en Tayrona (Colombia), ha practicado paddle surf… y un largo etcétera. Aunque todo esto parezca asombroso, para él, una de las mayores dificultades ha sido saber dónde dejaba la cantimplora, el plato, el cepillo de dientes… “Cuando me instalo en la tienda de campaña, al no ver, tengo que dejar las cosas cerca de la esterilla y luego acordarme dónde está cada una” asegura. 

Durante este mes, al lado de Adrián siempre ha estado Virginia quien ha sido mucho más que su monitora, ella ha sido su confidente y sus ojos. Los dos juntos han dado una lección de superación. Y, es que, las barreras de la discapacidad están para romperlas. 

El Norte con la Ruta BBVA

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