Llevo una temporada con la mente perezosa, se está apoderando de mi la galbana, esa que consigue que me deje llevar de la pereza pura y dura, y que se traduce a veces en melancolía y apatía, vamos, que estoy hecha unos zorros.
No quiero echar la culpa a la crisis del mundo mundial y España en particular, no, porque esa lo único que hace es cabrearme a tope en cuanto escucho los telediarios y abro el periódico en mi ordenador, tampoco a la niebla, que no me gusta, pero la asumo, no me queda otra.
Me pregunto si estaré en eso de “la crisis existencial”, pues lo mismo, porque por coger, me cojo todo lo que no debería y luego pasa lo que pasa, quien lo diría a mis años…
Y ahora me podéis decir y con toda la razón del mundo ¿y a nosotros que nos importa tu galbana, y tu crisis?, pues seguro que menos que nada, pero ya veis, he cogido a mi ordenador y compañero de fatigas y me he puesto a teclear y daros la paliza, pero corta, eh? creo que hoy no me he liado como las persianas como es mi mala costumbre, así que mejor no os quejéis :)
Buenos días y saludos blogueros.