Es increíble. No entro mucho en mi red social, es más, incluso estoy pensado en huir de ella como de la peste no acaba de llenarme, quizá la mantengo porque de alguna manera estoy en contacto con amigos que casi tengo olvidados.

 Pero leo verdaderas barbaridades en sus textos.

 Y no hablo de esa forma de escribir comiéndose las palabras por ejemplo escribir xq en lugar de por qué, muy común también en los mensajes de móvil.

 Hablo de faltas de ortografía garrafales, ¡ojo! también cometo alguna, no tiro ninguna piedra que lo mismo me cae encima.

 Lo mismo ocurre en algunas opiniones que se dejan en las noticias de turno del periódico.

 Tengo que reconocer que en mi caso mantengo una batalla campal con algunas palabras que no consigo saber si se acentúan o no, por más que me lo expliquen.

  Cuando voy a escribir un texto largo pongo el corrector por si las moscas, sobre todo cuando escribo en mi blog y seguro que aún así las meto dobladas aunque vosotros, seguro que muy benévolos conmigo, nunca me habéis dicho nada. Gracias por eso.

 Mis comas, puntos y comas, bailan flamenco hasta que sé cómo colocarlas, en fin….estoy pensando en apuntarme a un taller de escritura, no sería mala idea.

 Lo dicho, creo que usar el corrector no viene mal más que nada para no hacer daño en la vista al que nos lee.

 Pero me temo que eso de escribir tan deprisa esos textos generalmente cortos, de móvil, de redes sociales, no ayuda mucho a prestar atención a la ortografía.

 No sé si algún amig@ me echará la bronca por escribir sobre esto, pero seguro me perdonan porque saben que no va con mala baba, cada día tengo menos fuerzas para sacar las uñas con nadie, y menos con los amigos.

 Dicho esto me dais envidia los blogueros digamos, profesionales, suelo fijarme en sus textos, en cómo están escritos y me dan una envidia sana, siempre se aprende algo.

 Saludos blogueros.