Con sus ausencias, con sus infidelidades a los pocos blogueros que escriben, parece pasamos de todo, el sol y la luz del día más larga nos lleva a otra órbita de olvidar quizá por un tiempo el ordenador, quizá, sólo quizá.
Nada es igual, la vida tal parece que se paraliza, que nadie está ahí al otro lado de la pantalla de nuestro PC.
Últimamente estoy siendo una miaja infiel a los que siempre sigo, pero seguro me entienden y disculpan, son personas inteligentes y cercanas. Hay cosas que requieren mi atención, ya sabéis, eso de poner cada cosa en su sitio, ¡qué difícil es!
¿Cómo cuadrar un círculo? Imposible y cuando se vive en carne propia no es lo mismo que verlo desde la barrera, donde parece que todo tiene arreglo, pero no un círculo vicioso, decepcionante y muy doloroso.
Un abrazo a todos los blogueros, como decía hace un rato el cantinero, hasta Septiembre, lo siento cómo dice el gato de la imagen de hoy, o eso creo, lo mismo ya tengo inyectado en vena lo de escribir y…