Bueno, lo siento, me voy a meter en el charco que ha surgido hoy.

A las doce del mediodía estoy en el ordenador y viendo la tele en el avance del 24 horas escucho la noticia de “urgencia” Benedicto renuncia por agotamiento, le faltan las fuerzas para seguir en su labor.

A partir de ahí ha habido una lucha entre cadenas de TV, especiales, ruedas de prensa, para ver quien llegaba antes al análisis de lo que tampoco requiere tanto análisis, es mayor, está cansado es humano, y quizá demasiadas cosas en las que se entrará a especular acertadamente o no.

Cómo tampoco he estado mucho luego en el notición he opinado por aquí en el Norte (borrado incluido) y acabo de ver el telediario y lo último que escucho es eso de que el Espíritu Santo les guiará para elegir al nuevo pastor, alemán  o no.

Pues mejor que os guie, pero no un espíritu santísimo, mejor que os guie lo que la iglesia debería de ser, transparente, arrepentida, humilde como lo fue Jesús según vosotros, pero ya como que la mula, el carpintero,y demás nada que ver, y la virgen, esa madre soltera, no conocia varon, eso dicen, otras madres solteras tan vilipendiadas por los siglos de los siglos amen.

La Iglesia es riqueza, es pagar por todo lo que hay que ver y la gente quiere verlo, ¿mantenimiento? No digo que no, pero abuso a tope.

Palios, papa móvil, millones en cada visita papal a cualquier país, un ojo de la cara que la Iglesia no tendría por qué permitirse, hay mucho hambre por ahí, menos viajes, menos palios, menos oros y menos oropel. Aunque quiza les salen los viajes gratis total, cada país en nombre de la iglesia pone su ¿granito? de arena que por supuesto pagamos creyentes o no.

Sólo Cáritas y algún misionero abandonado a su suerte en países lejanos a cambio de bautizar a los “infieles” se salvan.

Así que bueno, seguro correrán ríos de tintas estos días que taparan otras letras y  tintas escritas sin desperdicio.

Pero no sería yo si no opinara sobre algo que me ha sorprendido desde la frialdad, pero la sorpresa está ahí, no la voy a negar.

Con todo mis respetos hacia los creyentes.

Saludos blogueros.