>

Blogs

elblogdejaime

Cosas que habías olvidado del deporte

El otro Nacho que se negó a jugar con España

Prensa y opinión pública se han extrañado estos días por la llamada de Del Bosque a Nacho, poco habitual en la primera plantilla del Real Madrid. No es la primera vez que este nombre (que no hombre) ‘alarma’ a los aficionados y cuarto poder de nuestro país.

La temporada 1995/96 fue atípica. Y no sólo por las nuevos cambios que se implantaron, como la llegada de los tres puntos por victoria, la instauración de los nombres en los dorsales o al incremento a 22 equipos (ni Sevilla ni Celta descendieron a Segunda B pese a la amenaza de la LFP). Lo más significativo fue en el plano deportivo, porque el Atlético de Madrid, que el año pasado había coqueteado con el descenso, marchaba firme al frente de la tabla, seguido de un sorprendente Compostela.

En ese equipo revelación había un jugador que podría acabar con las pesadillas de Javier Clemente, seleccionador español por aquella época. Se trataba del lateral izquierdo José Ignacio Fernández Palacios, más conocido como Nacho. En un puesto que tradicionalmente ha sido un quebradero de cabeza para el combinado nacional, parecía ser el sustituto ideal para Sergi Barjuán de cara a la Eurocopa de Inglaterra 1996.

Un obstáculo se interpuso en esa posible citación. El gallego, que había llegado a Santiago en 1992 después de seis temporadas en el Celta de Vigo, resultó ser la excepción que confirma esa regla futbolística que dicta que la ilusión de todo jugador es vestir los colores de su país. A pesar de que eran rumores, dejó muy claro sus intenciones en la TGV: “Ni tengo mucho interés, ni me apetece que me convoque. Pienso que no valgo para ese tipo de cosas. Creo que hay gente en este Estado español que lo puede hacer muy bien y que se identifica muy bien con la selección española, lo que me parece fenomenal. Desde luego, mi ambición no es esa. Prefiero estar así, me encuentro más a gusto”.

Cuenta la leyenda que el de Barakaldo contactó con él telefónicamente para aclarar la situación. Por aquella época, la Ley del Deporte inhabilitaba a aquellos deportistas que se negaban a ir convocados por una Federación Nacional para defender a la Selección Española. El entrenador aceptó su decisión y decidió tacharle de su quiniela, para evitar posibles reprimendas.

Nacho -popular en las manifestaciones sindicales y que hablaba en gallego con sus compañeros de equipo– cumplió su sueño de defender los colores de su comunidad en 2005 cuando, ya retirado, no quiso perderse el bautizo de la Selección Gallega en el estadio de San Lázaro, donde dejó huella en el lado izquierdo.

Autor: Víctor Goded (@goded19)

Pincha aquí para leer la anterior entrega de ‘Cosas que habías olvidado del deporte’

Temas


septiembre 2013
MTWTFSS
      1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
30