¡Zas! de Terry Pratchett
Por circunstancias de la vida estos días tengo más abandonado de lo habitual lo de manga y el anime. Una de esas circunstancias se ha llamado ¡Zas! de Terry Pratchett. Esta es ya su novela número 34 del Mundodisco perteneciente a la saga de la Guardia así que vuelve mi idolatrado Vimes y esa mezcla de razas, especies o lo que sea que es la policía de Ankh Morpork.
“- Entonces si se diera un combate entre una entidad vengativa invisible muy poderosa y casi diábolica de un lado y el Comandante Vimes por la otra… ¿sobre quién apostarías?
– No apostaría señor. La decisión sería cosa de los árbitros, creo.” Una conversación entre Vetinari y Nobby
Para este viaje Pratchett elige ¡Zas! (Thud!, en inglés) como título. Este nombre está basado en un juego de r0l basado en el Mundodisco en el que Enanos y Trolls se enfrentan en un tablero.
¡Zas! comienza en las vísperas del aniversario de la batalla del Valle de Koom, una batalla que nadie sabe muy bien ni como acabó ni como comenzó pero que todo el mundo sabe muy bien que sirve para alentar aún más el odio entre enanos y trolls. Además, sirve para que las hachas, garrotes, y cualquier instrumento para hacer pupita entre estas dos razas estén bastante a mano y los altercados en una ciudad como Ankh Morphok a la orden del día.
Todos estos problemas hacen que la Guardia esté más ocupada que nunca: turnos dobles y deserciones son el pan nuestro de cada día.
A esto hay que añadirle un cuadro muy grande de la batalla perfectamente elaborado por un pintor al que un pollo le hablaba al oído, pero sólo oía él, una leyenda troll, una maldición enana llena de símbolos siniestros en túneles oscurísimos y la intolerancia y el racismo como principal telón de fondo. También con un poco de conciliación de vida familiar y laboral.
Vimes debe enfrentarse a todo esto mientras intenta lidiar con aquellos que le quieren colar un vampiro en Su Guardia, intenta no hacerse un retrato familiar, está SIEMPRE en casa a las 18.00 p.m. para leerle ‘¿Dónde está mi vaca?‘ al pequeño Sam e intenta no volverse loco con la política (viñetas en el periódico y demás)
Como todas las novelas de Pratchett y para no ser menos esta también está plagada de citas ingeniosas, momentos tétricos, emocionantes… La verdad es que aunque haya sido elegida como la mejor del Mundodisco a mi no es la que más me ha gustado (Pies de Barro y La Verdad son magníficas) pero desde luego sirve para pasar un buen rato.