La certeza sobre lo insólito de esta tarde de domingo llegó en el mismo AVE que nos traía de regreso a Madrid desde Barcelona, tras cubrir el mitin de María Dolores de Cospedal en Badalona.
La dramática noticia del asesinato del sargento primero español, Juaquín Moya, a manos de insurgentes afganos, tuvo también su repercusión informativa en nuestra caravana: Carme Chacón, viajaba unos vagones más adelante. Como la ministra de Defensa aún no había realizado declaraciones sobre el atentado, los compañeros comenzaron a movilizarse para intentar gestionar con la propia ministra una primera valoración.
Chacón ndeclinó hacer declaraciones, porque consideraba que la situación era demasiado grave y dolorosa como para improvisar una comparecvencia y porque, además, viajaba con su hijo pequeño. Eso sí, Chacón tuvo la deferencia de trasladarse hasta nuestro vagón para, con gesto compungido, darnos los primeros datos del suceso. Todo un detalle, poco habitual en los tiempos que corren.
Un periodista catalán le preguntó cuándo pensaba volver a la campaña electoral y la candidata del PSOE al Congreso por Barcelona endureció el gesto y respondió: “Créame que eso es lo último que pasa por mi cabeza ahora”. Chacón, nada más llegar el Ave a Madrid (20.00 horaas) iba a ultimar los preparativos para coger un avión (a las 22.00 horas) rumbo a Afganistan para acelerar las tareas de repatriación del cuerpo del militar cordobés.
En la imagen, la ministra de Defensa departe con los periodistas de #camPPaña