El portero de la ética
Puede parecer un obviedad, pero como tantas obviedades se olvida de continuo: el primer deber del intelectual es ser honesto. El intelectual no solo ha de tener un fondo de cabeza bien surtido sino, más importante, la suficiente cintura mental como para admitir la duda, admitir la inseguridad, admitir que se ha equivocado y que […]