El cuco suizo
Suiza necesitó 500 años de amor fraternal, democracia y paz para legar al mundo el reloj de cuco, y unos pocos más para legar a Roger Federer. Ahora parece que lo del amor fraternal llegaba solo hasta cierto punto, en concreto hasta los ochocientos cincuenta kilómetros que, más/menos, es la distancia que separa sus fronteras […]