Sordo y mudo
<<¿Oiga? ¿Es el enemigo? Que se ponga>>. Aquí de momento no hay enemigos, no al menos declarados, ni hay cañonazos, aunque sí contenedores de fuego, cristales rotos y bombas de humo. Hay heridos —cerca de 300— y vehículos para el desguace —casi otros tantos—, pero no, y no lo quiera Sant Jordi, ningún afectado irreversible. […]