Cuadernos de lo otro
Nunca he encontrado un buen acomodo para las revistas en los estantes de la biblioteca. Su tamaño las impide amigarse con los libros que les llegan por la cintura y que dejan un vacío enorme por encima de sus cabezas, auténtico pecado de ordenación en las paredes de estos pisos siempre exiguos. Pónganse donde se […]