Con treinta años recién cumplidos, en 1962, François Truffaut se desplazó a Nueva York a promocionar ‘Jules et Jim’, su tercera película. Cuando llegó al otro lado del océano se empeñó en homenajear a Alfred Hitchcock. En un cine le ofrecieron presentar ‘La ventana indiscreta’, y Truffaut largó un elogio de una hora que sorprendió a los críticos. “¿Por qué en Cahiers du Cinéma tomáis a Hitchcock en serio? Es rico, tiene éxito, pero sus películas no tienen sustancia”, le dijo uno de ellos. Empujado por esta incomprensión Truffaut decidió hacer una disección en profundidad de la obra de su admirado, y le pidió una entrevista que finalmente duró una semana, con cincuenta horas grabadas. Hitchcock estaba en la última parte de su carrera, había estrenado ‘Psicosis’ y preparaba ‘Los pájaros’. Nada menos.

Aquella entrevista se convirtió en un libro, ‘Hitchcock/Truffaut’, publicado en 1966. En España llevó un título más explícito, y más tajante, ‘El cine según Hitchcock’, un tomo de Alianza Editorial que amarillea en muchas estanterías y sujeta con dificultad las páginas tantas veces recorridas con amor cinéfilo. Y ahora, más de cincuenta años después, un documental de Kent Jones va a recorrerlo de nuevo con cómplices de altura: Martin Scorsese, Wes Anderson, David Fincher, Olivier Assayas, James Gray, Richard Linkleter…

Entre las muchas cosas que Truffaut arrancó a Hitchcock, hay una que no ha dejado de citarse y enredarse: el Mac Guffin, una especie de clave falsa, de pretexto que llama la atención del espectador pero cuya aclaración se demora hasta arrinconarse y olvidarse. Puede ser una fórmula secreta, los planos de una fortaleza, el uranio escondido en las botellas de champán en ‘Encadenados’…

Se admiten propuestas, pero para mí en esta Seminci el Mac Guffin ha sido la visita de Francis Ford Coppola, aprovechando que el Pisuerga pasaba por Oviedo. Tanteos, saliva al teléfono, esperanzas, pero al final lo importante es otra cosa: sus películas en un maratón, la de Kent Jones sobre el libro, y tantas y tantas en estos días de sala oscura.