Ibarretxe dice que gobernará “desde donde sea”, sin especificar desde qué montaña
En Euskadi se come muy bien, pero hay papillas que son imposibles de digerir. Hoy, el ‘lehendakari’ en funciones ha dicho en Radio Euskadi que el PNV gobernará “desde donde sea”. La gente normal pensaba que la legitimidad de cualquier Gobierno democrático se proyectaba a la sociedad desde las instituciones, con el cumplimiento exquisito del ordenamiento jurídico y, sobre todo, de la voluntad del pueblo. Pues va a ser que no. Treinta años son toda una vida y no va a ser tan sencillo desmantelar toda la tela de araña vasca.
Lo cierto es que uno no sale de su asombro. Y luego está el aspecto de los conceptos y la construcción de las frases. Dice Juan José Ibarretxe: “Aquí lo que está claro (sic) es que, quien ha ganado las elecciones, está legitimado para liderar el país y que también está quien ha perdido” porque “es verdad que hay un candidato que ha perdido las elecciones y que quiere ser el lehendakari de este país”.
Todo esto está sucediendo en Euskadi, en un territorio que sigue formando parte del Estado español pero del que el presidente vasco se autoexcluye, cuando dice que “lo que trasladan desde España es una bronca”. PSE-EE y PP deben ofrecer “qué pueden construir juntos”.
Bien, veamos lo que pueden construir juntos PSE y PP. Nadie puso en tela de juicio las virtudes del PNV para construir país: acertaron aplicando algunas y fastidiaron a la gente normal con otras. Yo, que viajo mucho a aquel maravilloso territorio, soy testigo directo.
Mientras, Ibarretxe dejará de ser lehendakari para convertirse en aizkolari (cortador de troncos), en ese monte desde donde asegura que va a dirigir el destino de los vascos. Lo hará desde una montaña cercana, porque en Marte no crece un solo árbol.
(He colgado el enlace con la entrevista completa por ser riguroso, no vaya a ser que alguien no se crea lo que transcribo, porque es cierto que parece ciencia ficción.)