Cada día hay más imbéciles en España, o al menos eso creen algunos de los que se dedican a dar lecciones desde esos púlpitos en que se han convertido los foros. Mónica de Oriol es la muestra palmaria de este relato de la veleidad. La presidenta del Círculo de Empresarios reparte estopa a diestro y siniestro desde su privilegiada atalaya. Desde que pagamos el salario mínimo a gente que no tiene ni idea, hasta que las mujeres en periodo de fertilidad son un problema para las empresas. Cuando sus declaraciones se convierten en críticas furibundas hacia ella, Oriol recurre al tan manido ardid de que se han sacado de contexto. Luego, claro, visionas la comparecencia entera y es peor el total que el parcial de sus palabras. Se ha convertido en una práctica habitual tomar a la generalidad de los periodistas por iletrados o malintencionados y por estúpidos a quienes reciben la información editada.

Pero este fenómeno es contagioso, como la propia estulticia. Se ha unido a la fiesta descontextualizada el flamante y futuro presidente del Gobierno (según él). Pedro Sánchez aseguró en una reciente entrevista que sobra el Ministerio de Defensa, así, tal cual, sin matices. El secretario general socialista y aspirante a dirigir los designios del país (con el permiso de la izquierda populista) juzga innecesaria la existencia del departamento que se encarga de la seguridad de España. Ante el revuelo causado, desde el partido se han encargado de desmentir semejante aseveración, recurriendo de nuevo a la descontextualización. Imaginemos a esta nación de naciones sin militares. Bien, podríamos ahorrarnos sobresaltos como las asonadas y el ruido de sables, pero el territorio se quedaría a los pies de los caballos. Árabes o portugueses podrían encontrar la ocasión de vengarse y ampliar su espacio vital, que, en el caso de los primeros, es el mundo entero. Hmm, bien comienza Sánchez, con ‘boutades’ en cascada. Estoy seguro de que él no cree en esa majadería, pero ¿y si fuera así? España se pondría entretenida a más no poder.

Publicado en El Norte de Castilla el 8 de octubre de 2014