Discurso de Obama en la ONU pidiendo – es decir, exigiendo diplomáticamente – entendimiento entre dos pueblos que muchos ya consideran, y acaso ellos los primeros, irreconciliables; pidiendo, esencialmente, que dejen de matarse. Ojalá el abrazo se forje de una santa, musulmana o judía, vez. Mientras, el sistema legal americano asesina a un negro – a otro negro – en base a la prueba de la duda. El último de los 1269 asesinados desde la reinstauración americana de la pena de muerte en 1976. Desde este lado del Atlántico nos preguntamos, ingenuos, por qué se mantiene el asesinato estatal, institucionalizado, en los States. Se mantiene porque el pueblo lo apoya: más del 60% se muestra favorable al talión, que ni siquiera es tal. Ezra Pound escribió que la mala ley es la peor tiranía.