Wikipedia nació con voluntad planetaria y horizontal, accesible y comunal, palpitante y correctora. Wikipedia quiso abolir las fronteras del espacio y la historia, las fronteras del dinero y la clase, y lo ha conseguido. Wikipedia es un monumento al altruismo que sin embargo, ay, como muchas veces ocurre con el altruismo, abarca más aprieta. Wikipedia no es que contenga errores —también los contiene el Espasa—, es que contiene demasiado. Hoy tardamos el mismo tiempo en ir a la cocina a por un vaso de agua que en conocer el año en que García Márquez publicó Crónica de una muerte anunciada o el presupuesto anual del Departamento de Defensa de Estados Unidos. Otra cosa es que interese conocer tal presupuesto. Porque lo que Wikipedia da en inmediatez lo quita en intensidad, necesidad y fondo. El tener la certeza de que siempre la búsqueda obtendrá inmediata recompensa nos hace más propensos a la búsqueda sin preocuparnos ni por discriminar la búsqueda ni por dar una dirección a la respuesta. Buscamos por buscar, y en el momento de encontrado, olvidamos lo buscado. Y no nos importa, pues sabemos que >, y que podremos recurrir tantas veces como queramos, que Wikipedia seguirá dando. De este modo vamos resignando la memoria clic a clic, haciendo de Wikipedia el custodio de la memoria universal, que crece y crece a medida que la nuestra disminuye, y con la memoria el conocimiento verdadero (conocer es recordar en gran medida, y no solo platónicamente).
¿Pero es Wikipedia culpable? Wikipedia es inocente como es inocente un cuchillo, que sirve para cortar pan o cortar la yugular según quien lo empuñe. Wikipedia ha materializado el sueño enciclopédico de la Ilustración, pero lo ha materializado virtualmente. Depende de nosotros asentarlo, el ir más allá del dato por el dato, el abrir y leer Crónica… y no quedarse en 1981. Wikipedia merece el Princesa de Asturias, pero para cooperar hay que poner de parte nuestra.
(El Norte de Castilla, 25/06/2015)