La confesión (capítulo 33)
Sancho Panza “tenía por costumbre dormir cuatro o cinco horas las siestas del verano”, pero por agradar a la Duquesa que se lo pide y le trata ya de “señor gobernador”, se acercó después de comer a una fresca sala donde estaba junto con sus doncellas y dueñas. Sentado al fin en una silla baja […]