Resultan terribles días como hoy, días que miran hacia atrás en vez de hacia delante, días azules de zumo de tomate con pimienta negra donde sólo existen los blues del recuerdo, donde la saudade crece como una valkiria desnuda y donde nos hundimos en las arenas movedizas de los besos perdidos. Días como hoy son los que me demuestran que un hombre sólo puede aspirar a llevarse relativamente bien con su tristeza. Como Bogart en Casablanca. Días como hoy están hechos para los blues de Gary Moore. Y es que nadie ha sabido expresar algo tan triste con una guitarra como lo hace él…. “Solía ser tan fácil entregar mi corazón, / aunque he encontrado una manera más difícil. / Hay un precio que tienes que pagar, / descubrí que el amor no es mi amigo, / y debería haberlo sabido una y otra vez. / Hace tanto, fue hace tanto tiempo, / pero aún siento nostalgia por ti. / Hace tantos años, desde que ví tu rostro / que aquí en mi corazón hay un espacio vacío donde solías estar. / Hace tanto, fue hace tanto tiempo, / pero aún siento nostalgia por ti. / Aunque los días vayan y vengan, / hay solo una cosa que sé… / que aún siento nostalgia por ti”.