El grupo Texas, que como su propio nombre indica es de Escocia, nos regaló en 1999 un disco (The hush) menos guitarrero de lo que acostumbraba, aplicando sonidos y bases electrónicas a su música. Lo más sorprendente, sin embargo, fue la transformación de su cantante, la preciosa Sharleen Spiteri, que abandonó su imagen de rockera rebelde, con su eterna chupa de cuero, por otra mucho más sensual y provocativa. “Summer son” fue el himno que ejemplificó dicha transformación. Una canción sin edad, de las que te estalla en la memoria y con la que puedes arrebujarte recordando amores pasados. Una música que te incita a la pasión y que te sube, con su sonido menos acústico y más electrónico, al séptimo cielo. El vídeo (prohibido en su día por la MTV y por la BBC) te llena de energía: con el sol, con el mar y con una Sharleen extremadamente sensual y provocativa que se da un tremendo revolcón con el señor Sol. Ya está aquí el verano.