Todo un descubrimiento. “Chamamé”, de Leonardo Oyola, se llevó el Premio Hammett a la mejor novela policíaca de 2007 escrita en español (ex aequo con “El imán y la brújula, de Juan Ramón Biedma). Lo venden como un western contemporáneo a ritmo de rocanrol, un duelo a muerte entre criminales, una road movie salvajemente negra y criminal, una historia carcelaria de amores, amistades, traiciones y venganza. Dos piratas del asfalto, amigos de correrías (el Pastor Noé y Manuel Ovejero, el Perro) se dan caza después de que uno traicione al otro. La historia, escrita con un personal argot argentino y estructurada a lo Tarantino, está cargada de poesía, de violencia y de apabullantes referencias a canciones y películas. Un auténtica y originalísima novela negra sobre el brutal infierno que desencadena un ajuste de cuentas. Imprescindible.