“¿Alguna vez os habéis preguntado si la conciencia puede ser una hija bastarda del destino? Muchas veces yo lo hice y nunca supe encontrar una respuesta satisfactoria. Sé que el buscar respuestas es peligroso porque sólo conduce a plantearse nuevos interrogantes”.
El murciélago y el infierno (pág.1), amazon.es