“El Murciélago es un hombre que absorbe la oscuridad y aprovecha la noche. Tiene a los hombres más poderosos del país comiendo de sus manos. No teme a nada ni a nadie. Ni siquiera al palacio asesino. Para muchos, fue una prueba de valentía. Para mí fue algo perfectamente calculado. El palazzo Ciccarelli arrastra una maldición. Todos sus dueños han perecido en trágicas circunstancias. El Murciélago ha demostrado ser inmortal. Ni los caballeros templarios ni los zombis pueden con él”.
El murciélago y el infierno (pág. 87), amazon.es