Otra locura de Harry Stephen Keeler, con uno de sus acostumbrados argumentos desconcertantes, imprevisibles y demenciales. En esta ocasión nos encontramos con J. Hamilton Eaves, un tiburón de las finanzas, que recibe una nota firmada por alguien que se autodenomina “Estrella de la Noche”, junto a una baraja a la que le faltan tres reyes. En la nota se le indica que tiene una semana “para dar por terminado completamente su negocio de robos”, además de relacionarle con un artículo de Riswold Magazine titulado “los trece reyes de la banca corrompida de Chicago” en el cual se habla de trece negociantes de Chicago que están amontonando fortunas desplumando a los incautos… Hamilton descubre pronto que los otros tres tiburones recibieron una nota parecida junto a una baraja en la que faltaba alguno de los reyes. A ellos también se les urgía a que abandonasen sus negocios pero ninguno hizo caso y los tres murieron al poco tiempo en extrañas circunstancias. Es entonces cuando, para cubrirse las espaldas, Hamilton decide involucrar a un empleado suyo (Jason Folwell) y se las apaña para acusarle de haber robado en su caja fuerte. Consigue, así, que Jason firme una declaración de culpa (algo que hace para no involucrar a su prometida) y le chantajea para que, a cambio de no denunciarle, se haga pasar por él durante unos días, engañando así todo el mundo. Lo malo es que, a pesar del truco, J. Hamilton también es asesinado. La policía, entonces, acorrala a Jason Folwell que, a contrarreloj, tiene que demostrar su inocencia… Este es el principio de una novela que, como todas las de Harry Stephen Keeler, es lo más parecido a subirte a una montaña rusa. Desde luego, pocas lecturas tan entretenidas, adictivas y directamente sorprendentes como las que ofrece el señor Keeler, el escritor más delirante de la historia y el único capaz de enredarte en argumentos imposibles, en una maraña de historias que según se desmadejan dan paso a otras nuevas historias más increíbles si cabe. En fin, una muesca más en el fascinante mundo de HSK, en esta ocasión con una novela de triste actualidad ya que explora el asqueroso mundo de banqueros y tiburones de las finanzas que juegan con la vida de otras personas simplemente por el ansia de conseguir más y más riqueza.