Siempre he sentido una especial adoración por los aguerridos novelistas pulp que en España se hicieron famosos en los quioscos bajo el añorado formato de bolsilibros. Todos ellos forman parte de nuestra memoria sentimental. También son el ejemplo de lo injusta que siempre ha sido la alta cultura con la cultura popular ya que, a pesar de la calidad que muchos de ellos atesoraban, se les despreció sistemáticamente. Aquellos escritores de nombres míticos como Silver Kane, Curtis Garland, Arnaldo Visconti, Ralph Barby o Lou Carrigan fueron apartados de la historia oficial no dedicándoles ni siquiera una mísera línea en las historias de la literatura al uso a pesar de que vendieron libros como cosacos. Poco a poco, a base de defender a sangre y fuego a todos aquellos héroes, fui sabiendo de sus historias y de sus verdaderos nombres. Muchos han muerto y los que quedan ya son gente de edad avanzada aunque algunos están todavía a pie de cañón. No hace mucho, sin embargo, supe de uno de aquellos escritores de la mítica Bruguera y me llamó la atención que era muy joven. En efecto, Lem Ryan desembarcó en los bolsilibros casi al final de su época dorada cuando todavía era casi un adolescente lo que no le impidió escribir unos cuantos títulos (30 obras en cuatro años, del 82 al 86). Pues bien, Lem Ryan ha vuelto y lo ha hecho con “La Frati Nigra”, una novela que ha visto la luz gracias a un crowdfunding via Verkami
“La Frati Nigra”, muy en la línea de aquellas novelitas pulp pero lejos de los agobios y presiones editoriales a las que estaban sometidos los escritores de bolsilibros, es una novela entretenidísima y deliciosa que logra tenernos enganchados a la historia a lo largo de sus 214 páginas. En ella conoceremos a Lewis Miller, un escritor fracasado especializado en temas parapsicológicos, que se verá envuelto en una serie de extraños asesinatos rituales en serie cometidos por un desconocido que envía notas enigmáticas firmadas como Hermes. Perseguido por la policía y por el verdadero asesino, emprenderá la búsqueda de un libro mítico que hasta entonces había considerado irreal, un libro escrito por criaturas sobrenaturales que puede desatar todas las fuerzas de la oscuridad. Ayudado por una mujer que asegura llevar siglos tras ese grimorio y bajo la perpetua amenaza de una secta milenaria que ansía su posesión, sus pesquisas le llevarán por un sendero salpicado de cadáveres y de horrores que le conducirán al borde de la locura. De Londres a Damasco, y de allí a unas ruinas junto a una montaña donde algo espantoso espera ser liberado. En “La Frati Nigra” tenemos de todo: historias truculentas sobre una secta satánica que busca un libro perdido durante milenios, conspiraciones ocultas que sólo pueden ser el fruto de unas mentes desquiciadas, asesinos que no dudan en matar inocentes dejando escenarios sacados de imágenes del Tarot tan sólo para despistar a las autoridades, una guerra en la sombra que se lleva a cabo de manera sutil e inadvertida (una partida de ajedrez entre hombres tan poderosos que da miedo sólo pensarlo) y, por supuesto, el mítico Necronomicón. “Entonces alargó una mano, tocó la diestra desprotegida de Abberline y al instante en el cerebro del médico estalló la Tercera Guerra Mundial”.
Por cierto, Lem Ryan anda estos días enfrascado en intentar sacar adelante su nuevo proyecto que, dicho de paso, tiene una pinta fabulosa. Sólo el título ya nos hace salivar: “Sherlock Holmes: el hombre que no existía”. Como se acerca el final del plazo y todavía falta el último empujón animo a todo el mundo a que visite la página de este proyecto y se embarque en este nuevo y atractivo viaje que nos propone Lem Ryan.
http://www.verkami.com/projects/9696-sherlock-holmes-el-hombre-que-no-existia