Es un cuento. Una preciosa leyenda heroica y sobrenatural que muy bien podría haber escrito Gustavo Adolfo Bécquer. Tengo un amigo, Ariel Conceiro, que tiene una teoría al respecto. El capitán Etienne Navarre y la hermosísima Isabeau d’Anjou sólo pueden verse durante unos breves instantes, al amanecer y al anochecher, cuando sus manos casi llegan a tocarse. Por un terrible hechizo, él es lobo de noche y ella halcón de día…. Pero dentro de tres días, habrá un día sin su noche y una noche sin su día.
¿Sabes que los halcones y los lobos se unen para siempre?