Publicado en El Norte de Castilla el 26 de junio de 2010
“Ensayo sobre la ceguera” es la quintaesencia del desasosiego. Una novela perturbadora que es un puñetazo en el estómago de la conciencia humana. La historia de una inexplicable epidemia de ceguera que asola a todo un país es la excusa que utiliza Saramago para regalarnos una inquietante fábula apocalíptica que no es otra cosa que una oda a la maldad y a la bondad. La eterna lucha del bien y del mal. Una alegoría fantástica que nos demuestra que en cualquier situación el hombre acaba sucumbiendo a sus peores instintos. Una novela densa y difícil que, sin embargo, se devora con facilidad. También una novela turbia que encuentra la complicidad del lector a pesar del horror que nos describe el autor. Una obra, en fin, que se lee en unas horas y que te da para pensar durante toda una vida. Saramago nos habla de los ciegos, sobre todo de aquellos que aún conservando la facultad de ver se han ido quedando ciegos o simplemente miran a otro lado. El mundo se ha quedado un poco más ciego tras la muerte de Saramago.