SILLAS
Eran las cuatro de la madrugada. Todos estábamos tremendamente cansados. Apenas habíamos dormido en los tres últimos días. Eliazar, unas horas antes, había puesto el punto final al rodaje de su corto “Triángulos” y nos propuso quedarnos unas horas más para rodar una pequeña historia. El gran Cañas recitaba su monólogo con seriedad imperturbable pero […]