Ya que el año no ha empezado muy bien y el anterior terminó peor… Ya que la alegría por la desaparición de un dictador hijoputa se jode al contemplar su ahorcamiento en directo tras una ejecución inútil con visos de asesinato…. Ya que ahora mismo sólo me vienen las imágenes de un jovencito imberbe de Awja (la aldea natal de Sadam) proclamando: “nos convertiremos en bombas humanas”…. Por todo ello y porque uno no quiere sucumbir a la saudade, ni al miedo, ni a la desesperanza… Por ello, digo, voy a contar un par de chistes de mi amado Bush al que, por cierto, tengo que obligarle a escribir en la pizarra cinco mil veces aquello de “No nos comamos a los caníbales”. Por la cuenta que a él le trae….

CHISTE NRO.1: George Bush entra en una biblioteca y grita: “¡UNA HAMBURGUESA Y UNA DE PATATAS!”. Un asesor se le acerca y le susurra: “Presidente, que estamos en una biblioteca”. Entonces, Bush se da cuenta, baja el tono de voz y susurra al bibliotecario: “Una hamburguesa y una de patatas”.

CHISTE NRO.2: George Bush se acerca a un colegio para hablar sobre la guerra. En el turno de preguntas, Bobby levanta la mano y hace las tres siguientes: 1) ¿Por qué EEUU invadió Irak sin el apoyo de la ONU?; 2) ¿Dónde están las armas químicas y de destrucción masiva que usted aseguró que había allí?; y 3) ¿Qué pasó con Bin Laden? En ese momento suena la sirena. Bush dice que tras el recreo seguirá contestando a las preguntas. A la vuelta, otro niño levanta la mano y dice que quiere hacer cinco preguntas: 1) ¿Por qué EEUU invadió Irak sin el apoyo de la ONU?; 2) ¿Dónde están las armas químicas y de destrucción masiva que usted aseguró que había allí?; 3) ¿Qué pasó con Bin Laden?; 4) ¿Por qué la sirena del recreo sonó 20 minutos antes?; y 5) ¿¿Dónde está Bobby??